Cruces Negras y un emotivo homenaje a la voz del Metal 

El pasado 18 de mayo de 2024 se presentó Cruces Negras, una histórica banda tributo a Black Sabbath, en Casa Colombo. Esta vez, fue un homenaje a la voz del metal, Ronnie James Dio, en recuerdo de su fallecimiento. La banda invitada fue Vulcana. Uno de los primeros en llegar fue quien les escribe. Mientras esperaba a mi compañero de coberturas, en un abrir y cerrar de ojos se llenó de músicos invitados y colegas del ambiente.

Vulcana Metal, un emocionante acústico con sello argento

Pasados 20 minutos de las ocho de la noche se hizo presente esta agrupación, que cuenta a Ana Patané al frente, con un registro vocal atronador que inmediatamente se adueñó del recinto. Entre los temas que se pudo escuchar podemos citar «Sagrado Cordón» y «A los Animales». La voz de Ana fue un factor fundamental para que la gente se acerque cada vez más a escuchar la performance. Así fue como más colegas, músicos y público se acercaron al subsuelo de Casa Colombo. Debemos citar que la frontwoman tiene su otro proyecto llamado Rama Negra. En este reversiona en formato acústico canciones de Hermética, Almafuerte, Malón y V8, entre otros. La noche transcurría mágicamente: los acordes eran el banquete principal de nuestros sentidos. Las agujas de los relojes se detuvieron y ya no interesó lo que sucedía en el exterior, estábamos en otra dimensión.

Pero el encanto tiene un principio y un final. Los últimos temas de Vulcana fueron «Vientos» y «Refugio» . 10 minutos antes de las 21 y bajo una lluvia de aplausos, finalizaron el show.

Cruces Negras: el espíritu de Ronnie presente en Casa Colombo

El paso de Vulcana encendió la llama del metal, y Cruces Negras se encargó de elevar el calor al máximo. Pasados 15 minutos de las 21 salieron al escenario. Entre matices rojos y oscuros, con la introducción de la mano de «E5-150» pegada a «The Mob Rules». Siguió «Lady Evil» con Renzo Favaro en la voz. Logró con sus registros vocales traspasar el recinto e imaginariamente llegar hacia una estrella donde el gran Ronnie ha de encontrarse. La gente, con los puños en alto, cantaron estos 2 primeros temas con mucho fuego sagrado interior.

Tal y como se anunció, este homenaje tendría invitados especiales, por ello fueron sucediéndose las presencias de Erica Maillo, Eve Borchichi (Soster), Eddie Walker (Lethal, Reinará La Tempestad), Alan Fritzler (Rata Blanca, Barro) y Rodrigo Lefosse (Matan S.A, Témpano). Una primera etapa donde la emotividad y la adrenalina estuvieron en la cima. Sonaron «Wishing Well», «Children of the Sea», «Falling off the Edge of the World» y «TV Crimes», donde la furia se elevó bastante y las cabezas se agitaron al son del espléndido show de la banda y sus colegas. La mano cornuta fue moneda corriente en una noche única en el año.

Los invitados que hicieron del show una reunión entre amigos

El escenario estaba en llamas. Entre temas los músicos se sucedían con una preparación previa y a un ritmo excelente para entrar y salir. No permitieron que el público se enfriara. Subió Ana Patané para interpretar «Follow the Tears». Con un tinte más oscuro y pesado, portando una vincha de cuernos y encarando las vocales siempre con el gesto del Maloik. Siguió «Bible Black» y para «Voodoo» y «Country Girl» se incorporaron Emma Gerbam (Ariadna Project) y Eve Borchichi en voces (con la participación fugaz de Julián Rodriguez, el bajista de la banda, en algunas líneas de la segunda canción), Ariel Bellizio, Ale y Juan Manuel López (los tres pertenecientes a Fughu, otro proyecto de Renzo, quien también es el vocalista de Jerikó). En «I» la formación cambió para dar lugar a Gonzalo Cejas (Bloodparade), Adrián Espósito (Nepal) y Maximiliano Cabral (Cabral).

Así llegaron los últimos tres temas. Para el primero de aquellos, los últimos invitados subieron al escenario. Amy Rama (Tormenta Arrolladora) en voces, Ruben Martínez (Vorax, Iorio) en guitarras y Beto Vázquez (Nepal, Beto Vázquez Infinity) en el bajo. Así formaron para «Die Young», antes de que la banda volviera a su formación original tras tantos cambios. Volvieron Adrian Daguerre y Prati Suarez a las guitarras, junto a Julián Rodriguez en bajo, Ale Reggiani en batería y Nicolas Loto, quien no se retiró del escenario en ningún momento, alternando entre teclados y guitarras. Para el cierre se guardaron los mejores clásicos del primer disco de Sabbath con Dio. «Neon Knights» y «Heaven and Hell» dieron el broche de oro a un show espléndido, a quince minutos de las 23 horas.

Desde Vientos de Poder, agradecemos a la banda por la invitación a ser partícipes de una noche colmada de gemas clásicas e himnos del Metal Pesado.

Crónica: Sergio Silva
Fotografías: Facundo Rodriguez

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Sergio Silva

Cronista de recitales y entrevistador de músicos. Conductor. Colaborador en el programa "Heavy Rock y Algo Más" de Mar del Plata. Colaborador en el programa "Metales Brillantes". Me gusta mucho el rock, el metal y sus diferentes vertientes, me considero un trotamundos en los recitales, y soy muy insistente a la hora de conseguir entrevistas e información para difundir.

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