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Breve historia de Riot, uno de los pilares del género

Informe sobre una de las bandas fundamentales en la historia del Heavy Metal a nivel mundial

Hablar de Riot, es referirse a uno de los proyectos musicales que delineó y perfeccionó el sonido de la incipiente escena metálica a fines de la década del ’70. Identificados en la línea del Heavy/Power Metal, fueron fundados por el guitarrista Mark Reale, un genio compositivo y virtuoso de las seis cuerdas, que comenzó la aventura con el vocalista Guy Speranza, el guitarrista rítmico Louie Kouvaris, el baterista Peter Bitelli y el bajista Jimmy Iommi (no, no tiene ningún parentesco con el maestro de la oscuridad, el gran maestro Tony, de Black Sabbath). Juntos patearon el tablero en 1977 con la salida de «Rock City», un álbum cargado de riffs bastante pesados y alocados para la época. Tal vez escucharlos hoy no nos resulte tan demoledor, pero recuerden que hablamos de la infancia del género.

Aunque es considerada una leyenda dentro del género, nunca alcanzó el mismo nivel de ventas y reconocimiento que sí alcanzaron bandas como Iron Maiden, Judas Priest o Helloween. No está fuera de lugar decir que esta gente ya estaba tocando elementos del Power Metal siete años antes que esta última saque su disco debut… También es racional afirmar que el sonido de estos neoyorquinos ha influenciado claramente a la escena en general. Incluso a agrupaciones como las antes nombradas, que han usado riffs e ideas de Riot. Por ejemplo, se puede comparar la canción «Swords and Tequila» del álbum «Fire Down Under» (1981) de Riot con el clásico de la doncella, «2 Minutes to Midnight», del álbum «Powerslave» (1984).

Primera alineación de Riot: Guy Speranza, Mark Reale, Louie Kouvaris, Peter Bitelli y Jimmy Iommi

Además de los riffs, también se puede apreciar la influencia del sonido de la banda en ese momento. Es que estaban siendo precursores en el estilo Heavy/Speed, mezclando elementos del Hard Rock, Blues y acercándose a lo que más adelante sería el US Power Metal. Otro caso interesante es el del álbum «Thundersteel» (1988). El concepto de la canción que da título al disco es similar al concepto de «Painkiller» (1990) de Judas Priest. Sin dudas, uno de los discos más influyentes de la historia del Heavy Metal. Por otra parte, se puede mencionar el tema de los riffs y la intro de «Black Leather and Glittering Steel», del álbum «The Privilege of Power» (1990), que salió ocho meses antes que el lanzamiento de «Leather Rebel», de los sacerdotes. Invito a  escuchar y comparar estas canciones.

Una aclaración. Acá la idea no es desmerecer el trabajo de aquellas bandas. Es más, nosotros mismos somos fanáticos tanto de Maiden como de Priest. A lo que vamos es que si estás bandas tomaron como inspiración el sonido de Riot, hay que darle su lugar de relevancia en la historia del género. No hay dudas que las huestes de Mark Reale han sido una especie de impulsores silenciosos de lo que definió el sonido del Heavy Metal. Ahora ¿porque las cosas se dieron de esta forma para esta agrupación que suena a NWOBHM, sin ser británicos?

Primeros registros de Riot, con Guy Speranza al frente

Una historia intermitente

Riot ha tenido varios altibajos a lo largo de su historia. Las razones por las cuales no lograron consagrarse como una de las más grandes del Metal y el Rock, son diversas. Los cambios de vocalistas y músicos (que fueron cambiando la cara de la agrupación) es una de estas. También tuvieron algunos problemas con las discográficas. Sin embargo, esta negación a seguir al pie de la letra lo que le pedían las productoras, es lo que hizo que la banda pudiera mantener un estilo único. De no haberlo hecho, tal vez hubieran sonado igual al resto de las agrupaciones de aquellos años, a las cuales intentaban volcar mas a la línea del Hard Rock comercial.

Otro factor que parece haber afectado su popularidad es la elección de la mascota de la banda. En el momento en el que se publicó su primer álbum, existía una importante polémica sobre la caza de focas. La novia de un responsable de su productora decidió que sería comercialmente positivo que en la portada figurara un híbrido de foca y humano, vengándose de los cazadores. Esto resultaría tener más bien el efecto contrario, a excepción de Japón, que le gustan esas cosas bizarras. Así nacería «Johnny, the Mighty Tior», la mascota del grupo. Sin embargo se encariñaron con el humanimal, y apareció en las sucesivas portadas. Mientras Maiden tenía a la momia Eddie, Megadeth a la calavérica Rattlehead, Dio al demonio Murray y Motörhead al perro infernal Snagletoth… Riot tenía un Hércules con cabeza de foca bebé.

En 1982 se genera otro gran simbronazo cuando Speranza deja el grupo (los motivos, desconocidos hasta ahora). Ingresa en su lugar el consumado vocalista Rhett Forrester. La presencia y el carisma del nuevo frontmann le dan un plus a Riot en el escenario. Además, con algunos ajustes de tuercas en las composiciones, comienzan a tocar en grandes estadios, acompañando a los dinosaurios de la época. Es la época donde los de Mark Reale comienzan a sonar con mayor rotación en las FM de aquellos años. Con la trilogía de los álbums «Restless Breed», «Riot Live» y «Born In America» dejan una huella imborrable.

Sin embargo, el grupo se separa en 1984. Si bien estaban en la cresta de la ola, problemas internos entre ellos, otros administrativos y con las discográficas generan la debacle. También se habla de una desgastante pelea con Quiet Riot, la banda liderada por Kevin Dubrow, por la similitud de los nombres, y el gran éxito que alcanzaban aquellos.

El regreso

Dos años después, luego de intentar algunos proyectos solistas, Mark decide reflotar la agrupación. Para esto convoca al eximio vocalista Tony Moore, al bajista Don Van Stavern (quien se encuentra en las filas del grupo en la actualidad) y al virtuoso baterista Bobby Jarzombek (también conocido por ser parte de la banda solista de Halford, Juggernaut o Fates Warning). Con esta tercera alineación, logran la etapa más exitosa, y que dejaría marcada a fuego la historia de la banda.

La formación que graba el emblemático «ThunderSteel»: Van Stavern, Reale, Moore y Jarzombek

En 1988 editan el legendario «Thundersteel», y consiguen firmar con Sony de Japón. Esto les permitió girar por primera vez en el país del sol naciente, donde siempre tuvieron una gran número de fanáticos, tal vez el fuerte de Riot. Además les garantizó varias giras por los Estados Unidos. Es cuando ingresa a la banda otro miembro que sería histórico, y se mantiene hasta nuestros días manteniendo la llama encendida: el guitarrista Mike Flyntz.

En esos años, giraron una vez más por Asia y el Reino Unido, todo parecía comenzar a enderezarse para el emblemático grupo. Pero con la llegada de la década de la década del ’90, el grunge se convirtió en el rey de las radios y las cadenas televisivas de música. Esto afectó al Rock y al Heavy Metal en general. Obviamente también repercutió en Riot, que nunca cambió su estilo, y siempre se mantuvo fiel a sus raíces. Pero la popularidad nuevamente comienza a declinar. Fue allí cuando llegó otro cambio de vocalista para 1993, con el ingreso de Mike Dimeo.

La agrupación consiguió un contrato en los Estados Unidos con un sello independiente, Metal Blade Records y se mudó de Sony de Japón a EMI. Ahí grabaron su octavo álbum, «Nightbraker», con el cuál llegaron a girar nuevamente por Japón. Pero sin suerte en los Estados Unidos. Si bien el grunge estaba agonizando, la música alternativa era lo que estaba empezando a pegar en ese momento, y el Rock y el Metal seguían siendo los grandes olvidados por la industria musical.

Riot junto a Mr. Udo, el promotor que los llevó de gira por Asia

Desde el año 1997 hasta el 2006, editaron cuatro álbumes de estudio más con Di Meo a cargo de las voces. En ese lapso pasó por la banda otro condecorado baterista: Bobby Rondinelli. Pero ocurrió otro standby, hasta que en 2010 el fundador y genio de las seis cuerdas decide reunir la formación más exitosa de Riot, la que en 1986 publicó el icónico «Thundersteel». Así en 2011 editan «Inmortal Soul», un álbum que fue muy bien recibido por los fans, ya que viene con todos los ingredientes que estos esperaban. Pero el trabajo quedó marcado en la discografía de la banda como «el canto del cisne» que nos dejaría el legendario Mark Reale. Es que pocas semanas después de su salida, un 25 de enero de 2012, el líder de la agrupación fallece producto de la enfermedad de Crohn, y complicaciones relacionadas a la misma.

Esto pone un punto final a Riot, tal como la conocimos. A pesar de la pérdida irreparable, la agrupación ha dejado un legado importante en la escena del Metal. Es que ha influenciado a artistas de la talla de Metallica, Hammerfall, Rhapsody y muchos otros. Es una banda por demás fructífera, que siempre se mantuvo fiel a su sonido. Un proyecto innovador que, dadas todas las circunstancias enumeradas anteriormente, nunca logro llegar a un público masivo, ni tener el reconocimiento que merecieron.

La última formación de Riot con Mark Reale

La bandera en alto

Sin embargo, el legado de uno de los pilares del género no podía apagarse. Es asi que los restantes miembros de la banda, encabezados por los viejos laderos de Mark, Don Van Stavern y Mike Flyntz, deciden mantener las banderas en alto. Por supuesto, antes fue necesaria la aprobación de la familia del creador del grupo, que dio el visto bueno. Principalmente como una forma de mantener el alma de su hijo encendida.

A modo de respetar la relevancia que tuvo Mark Reale (es claro que no sería lo mismo), le agregan al nombre el cinco en números romanos: Riot V. Algo así como la quinta encarnación del grupo, ya que había ingresado el quinto vocalista: el virtuoso Todd Michael Hall, proveniente de la banda Harlet. Con él ya llevan publicados tres grandes trabajos de estudio: El «Unleash the Fire» en 2014, de rotundo éxito en Japón (siendo uno de los más vendidos en aquel país ese año), el «Armor of Light» en 2018, unaverdadera lección de Heavy Metal de vieja escuela, y el más reciente «Mean Streets», el cual llegan para presentar a Sudamérica en el mes de septiembre. En Argentina, la cita será el 12 de septiembre en El Teatrito, de la mano de Icarus Music.

Por nuestro lado, creemos que es un acierto haber mantenido a Riot activa, a pesar de la pérdida de Mark Reale. Si bien fue el miembro constante de la banda, y mantuvo su fuerza creativa hasta el último momento, su partida no justificaba dejar abandonada en el pasado una banda que es un pilar fundamental de la escena metálica mundial. Un grupo que siempre se mantuvo fiel a su sonido, al costó de tener discusiones críticas con productores y discográficas. Siempre con el mensaje de seguir adelante, y luchar por lo que uno cree: “¡Shine on Warrior!”.

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Redacción

Esta nota fue redactada en colaboración por varios miembros de este medio.

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